domingo, 30 de noviembre de 2008

cuesta

Para, basta, ya no cuentes mas conmigo
hoy me atacas olvidando que hasta
ayer yo fui tu abrigo.
Respeta lo que hemos vivido,
no dejes a tu maldad
ensuciar todo, lo que también es mío.


tovien









cuesta aprender a saber valorar a la gente que ingresa a nuestra vida
cuesta entender que lo que uno creia no es lo que el otro piensa
y despertar cuando el tren se va lejos
no se puede llorar el ayer,
pero se puede cambiar el mañana
ser un poco mas cuidadoso en cuanto a quien darle el corazon
que con una simple traicion
pueden dejarnos un gran vacio.
un amigo no es uno mas
podes tener millones y perder el que mas querias.
y como se sigue?
yo siempre quise dejar la puerta abierta
y confiar en que si el otro quiere puede volver
pero descubri que las puertas abiertas son un peligro
porque el otro no siempre vuelve
y entran cosas que nos hacen mal.
cierro mi puerta entonces
aunque quizas nunca deje de abrigar
esa esperanza que me dice que un dia volvera a tocar
y saber que no fue en vano llorar.